Los Smörfs invaden la tierra

Uno de los grandes asuntos por resolver del arte contemporáneo es su inclusión, exposición o integración en los espacios públicos.

Por mil ejemplos de artistas y proyectos que no atinan encontramos uno que da en el clavo. Este es el caso del montaje con el que los alemanes Venske & Spänle han tomado toda la ciudad de Valencia.

Hagamos un breve resumen de la historieta-tiene mucho de cuento:, hasta de leyenda futurista, de cómic o película para dormir a pierna suelta, porque nada hace sospechar que esta trama entrañe maldad alguna.

Los llamados Smöfs son los protagonistas absolutos de esta invasión pacífica sobre la capital mediterránea.

Desde un contenedor instalado en el antiguo cauce del río Túria que casi parece su base de operaciones (una nave nodriza bien original) y muy cercano al Palau de las Artes y las Ciencias, se han ido apoderando de distintos emplazamientos urbanos, de parques a jardines, incluso escaparates de tiendas y establecimientos significativos, y hasta del Museo San Pio V, sin que a este le haya parecido tal atrevimiento una falta de respeto (El arte contemporáneo en comunión, una vez más, con el arte más clásico, con la tradición sin estridencia alguna). de los Smörfs , unos dicen que son amorosos; otros que son simpáticos y traviesos; yo añadiría que hasta un poco falleros aunque el color no se encuentre entre sus características morfológicas.

Todo ello cierto, pero si nos ponemos estrictamente artísticos, de lo que tenemos que hablar es de esculturas cuyas formas te pueden llevar a Brancusi o Henry Moore. Aquí además cabe ponerse futurista en las formas y en el fondo, con lecturas de carácter irónico al mas puro estilo Erwin Wurm y hasta de Claes Oldenburg si nos retrotraemos a los prolegómenos del pop y sus padres y herederos directos al otro lado del charco. Así lo hace ver Javier Hontoria en el texto que introdujo su primera exposición en el espacio Ana Serratosa en el año 2011

Apoyo unánime

Ahora que citamos a este último, destaquemos los pequeños y grandes Smörfs que se tragan piezas de la vida cotidiana, de latas o botellas a farolas, o que salen de objetos como tazas de café o cajas de cerillas.

Por eso, una intervención pública como esta nada tiene que ver con los nefastos proyectos a los que nos tienen acostumbrados: la instalación de una obra-como caída del cielo- de tamaño gigantesco cuya integración con el medio urbano suele ser nula, y ya no digamos con los habitantes de ese espacio o lugar: ignorados o ignorantes.

Por eso cuando u proyecto como este cautiva a expertos, a no tan expertos; a la gente de la calle sin más, quiere decir que ha triunfado en sus objetivos. es una intervención publica con todas las de la ley.

Varios emplazamientos de la ciudad de Valencia. Coordina: Fondo Arte-AS. Comisario: Santiago Olmo. Hasta el 1 de abril